Atractiva por su precio, la resina de CBD atrae a los consumidores por su alta concentración de cannabidiol, pero cuidado, no se utiliza como cualquier otro producto de cáñamo. Aquí tienes nuestros consejos para sacar el máximo partido a la resina de CBD.
Recordatorio: ¿qué es la resina de CBD?
La resina de CBD, más comúnmente conocida como hachís, es un producto derivado del cáñamo y, en particular, de las flores femeninas del cannabis. En efecto, estas últimas producen un material espeso y pegajoso cuando no son polinizadas, que es el famoso hachís.
Este material está compuesto de tricomas, cristales microscópicos que permiten la producción de cannabinoides (incluido el CBD), pero también de terpenos y flavonoides que le confieren aromas y sabores únicos. Las resinas de CBD se obtienen separando los tricomas de los cogollos florales. La resina se puede cosechar a mano, golpeando mecánicamente las plantas o sumergiendo las flores en agua helada y tamizándolas después para recuperar las partes necesarias.
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Cocina con tu resina de CBD
El hachís CBD se puede utilizar de muchas maneras, pero cocinar es una de las formas más divertidas de usarlo, ya que es completamente comestible. A continuación te explicamos cómo hacerlo, pero ten cuidado: utilizar lapotente resina CB D en la cocina es relativamente difícil, ¡no es para cocineros ocasionales!
Antes de empezar a trabajar con ella, tienes que descarboxilar la resina de cannabis metiéndola en un horno durante 1 hora a 110/115 grados. A continuación, debes saber que el cannabidiol (en cualquier forma que se comercialice) es liposoluble. Por lo tanto, es necesario trabajar con una grasa. Por lo tanto, optamos por una receta que incluya aceite o mantequilla. ¡Las galletas y brownies de CBD son tuyos!
Vaporiza tu resina de CBD
Vaporizar resina de CBD es otra opción de consumo para los usuarios que no tienen el talento de Philippe Etchebest. Para consumir resina de CBD de esta forma, lo único que necesitas es un vaporizador.
A continuación, desmenuce la cantidad deseada de resina y colóquela en el recipiente suministrado. Asegúrese de que el recipiente esté suficientemente lleno y presiónelo sin ejercer demasiada presión. A continuación, encienda el calentador a una temperatura de entre 160 y 220 grados. Si la temperatura es más alta, corre el riesgo de quemar el material y degradar sus beneficios. El aparato le indicará cuándo el producto está listo para ser consumido.
Advertencia: fumar resina de CBD es insalubre e ilegal
A diferencia del vapeo, que no implica la ingestión de ningún material distinto del cáñamo y no sobrepasa el punto de combustión, fumar resina de CBD está totalmente desaconsejado. De hecho, este método de consumo requiere la adición de tabaco que, como sabemos, es extremadamente perjudicial para la salud. Además del humo inhalado, fumar CBD significa quemar el producto, y sabemos que la combustión está asociada a riesgos de cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Por último, la legislación francesa prohíbe fumar CBD. Se trata de una doble advertencia contra este modo de consumo.
